Así la sala de exposiciones se prepara dentro del recinto de S-CAB, en un espacio industrial de 600 m², mantenido intacto en todas sus peculiaridades arquitectónicas y materiales originales, desde el techo abovedado, a los tirantes estructurales, las ventanas luminosas de hierro que perfilan su perímetro, el montacargas de acceso al nivel y el pavimento continuo de resina. Incluso la parte de ingeniería industrial, aunque totalmente renovada con productos acordes con la evolución tecnológica, está concebida a la vista, declarada en su tecnicidad, como suele ocurrir en los espacios industriales.
A continuación, el acondicionamiento se completa con zonas de recepción y de servicio comercial, que hacen que el espacio sea capaz de satisfacer todas las necesidades de los visitantes: en consonancia con el ambiente conceptual general, hay por tanto palcos de hierro y cristal para reuniones con distribuidores y profesionales, una vitrina reservada a piezas históricas de S-CAB, una zona de descanso con ventanas panorámicas, una gran sala de reuniones y una zona de bar de bebidas y de servicio.
Por último, no hay que olvidar que, al fondo del gran panel institucional situado en el centro del espacio, hay un contenedor de muestras con un área dedicada a los numerosos premios de diseño que S-CAB ha ganado en los últimos años.